Treinta y dos

=)

Hace unas horas, puedo decir que me hicieron todo el año :P

Conocí a un ser humano lindo en toda la extensión de la palabra, vaya que la humildad siempre estará presente en las personas que realmente tienen grandes virtudes naturales, no las que se han ido ganando con el paso del tiempo.

Creo que esa humildad se trae de nacimiento, es como si nacieran con estrella, son estrellas y se sienten la más sencilla de las flores.

No sé, pero en común las personas que admiro tienen grandes valores, tan sencillos como un gracias y un de nada.

Tuve la oportunidad de degustar alrededor de 32 trozos de chocolate en compañía de un par de grandes amigos y sus respectivas compañías, los escogí a ellos porque sabía que el momento lo iban a valorar tanto o más que yo.

La cata de chocolate fue muy diferente a lo que yo esperaba, comenzando por la manera en que se realiza y terminando con un chocolate relleno de vinagre balsámico, que sabe mejor que el nombre.

Desde una tarde de recreo escolar, hasta los campos lejanos de Malasia así nos transportamos con la imaginación y los sabores.

Es maravilloso cerrar los ojos e imaginarte que estás en un lugar y que al mismo tiempo hueles y pruebas algún elemento de la región.

Quedé encantanda con el sabor chamoy, la jamaica, el mango, el romero, el de chicle, el de maracuyá, el 75% cacao, el 85% cacao, de mole y de té chai; que mi paladar sintiera la horchata y la jamaica rodeada de chocolate y que el queso roquefort sabe mejor como postre que como plato fuerte.

Tras copa de vino blanco, chocolate, rellenos frutales y exóticos, las risas de los presentes, los recuerdos y la magia del momento, puedo asegurar que esto ha sido uno de los mejores momentos que he pasado en este año.

Y salí no solamente con la lengua azul por el sabor chicle, ni alcoholizada por las tandas de vino sino feliz e inspirada por la presencia del anfitrión.

Fue una gran experiencia, un gran momento, conocí a un mexicano que es un digno ejemplo a seguir, una persona que deja en alto el nombre de nuestro país a nivel mundial, alguien que más que una figura pública, es un digno ejemplo.

Y si pudiera, me convertiría en cacao para ser procesada por esas manos...

Commentaires

Liliana Salazar a dit…
Sonny muchas gracais por la invitación, simplemente estuvo genial.
Impresionante, sorprendente, mágico.
wooooooooooooooo

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